El trasporte público en Cancún

Cancún es una ciudad muy cosmopolita, la zona reservada a los turistas es amplia y será necesario moverse para poder trasladarse de una zona a otra. Indispensable si queremos ir de tiendas o de marcha.

Tenemos dos posibilidades principales para moverse por la ciudad, el Taxi o el Bus.

El taxi en Cancún

El taxi es el trasporte más caro, no obstante si vamos varias personas nos saldrá bastante más económico. Se podrá regatear con el conductor bajándonos sensiblemente el precio.

En Cancún, los taxis tienen un recargo si entran en el hotel a recoger a los turistas, así que si queremos que nos salga más barato, simplemente tendremos que salirnos de las instalaciones del hotel  e ir a la carretera principal.

Una vez fuera del complejo, veremos como a la entrada del hotel y durante todo el día y la noche se parar los taxistas, simplemente por caminar unos 50 metros, nos podemos ahorrar tranquilamente entre un 30% a un 40%, si regateas bien, incluso te puede llegar a salir a mitad de precio.

Los taxistas suelen parar en las paradas de bus, para recoger a los turistas, en este punto siempre ofrecen los mejores precios, pues suelen competir con los propios buses para “robarse” clientes.

Este será el medio principal si queremos dejar la zona hotelera, aunque no es muy recomendable salir fuera de esta.

El autobús público en Cancún

El servicio de buses en la parte hotelera de Cancún funciona durante las 24 horas, suelen tener una parada cerca de cada complejo hotelero, así que siempre tendremos una cerca.

Este es el medio con diferencia más barato, el billete es inferior al cambio a 1€. Además la frecuencia durante todo el día es excelente y funcionan también durante toda la noche bastante bien. Además como la línea hotelera sólo lo atraviesa una carretera principal, el bus nos podrá llevar a cualquiera de los sitios más importantes de la zona turística sin pérdida.

Una cosa que sorprende de los buses, es que los conducen a toda velocidad, incluso a veces llegan primero al destino que los propios taxistas, dando una sensación de ir a lo loco y de inseguridad, aunque también se nota que son gente muy experimentada y de gran experiencia en conducir de este modo.